lunes, 17 de noviembre de 2008

Relato erotico: Con mi vecino 25 años más joven

Hola a todas, mi nombre ficticio es Anais, tengo 52 años y vivo en Madrid, estoy divorciada y tengo dos hijos, de 25 y 27 años, ambos muy bien formados y porque no decirlo, muy atractivos, siempre me he sentido atraída por los chicos jóvenes, es algo que no se explicar, pero me pone cachonda, siempre que me masturbo pienso en que algún chico más joven que conozco, hijos de mis amigas, vecinos, etc, acaba haciendomelo en cualquier parte, el caso es que nunca pensé que esto fuera a hacerse realidad... pero ocurrió.

Vivo en un bloque de pisos de la capital y de vecinos, tenemos a una familia a la que conocemos desde que me fuí a vivir allí con mi ex marido, hace ya más de 20 años, es una pareja con dos hijos, un chico de 28 años, Javier, y una hermana 5 años menor, Natalia. Siempre ha habido mucha confianza con ellos y eso es lo que me permitió, casi por casualidad, darme una tremenda ración de sexo con Javier.

Estaba un sábado, sobre las dos de la tarde, llevaba algunos días con problemas con mi conexión a Internet, por algún motivo no me funcionaba (debo decir que aprovecho internet para muchas cosas además de encontrar información), mis hijos se encontraban ambos de viajes y me crucé con Javier, el vecino, es alto, debe medir 1,80 o más, delgado pero fuerte, los vaqueros se le aprietan en el culito y viste habitualmente muy bien, ese día, sólo llevaba unos vaqueros y una camiseta blanca de D&G, me acuerdo de ella muy bien, el caso es que le comenté los problemas de internet, sin más intención que el que me los arreglara y se ofreció a venir a verlo a casa después de comer. Así quedamos...

Como a eso de las 4 sono el timbre de la puerta, yo llevaba puestos unos shorts y una camiseta de tirantes, lo que suelo utilizar para echarme la siesta en verano, y casi sin darme cuenta y adormilada, abrí a Javier, sin darme cuenta de que no llevaba sujetador y a dónde me iba a llevar esa situación posteriormente...

Cuando entró ya note algo raro en su mirada, se me marcaban los pezones y le llamaron la atención, eso a mi me hizo ponerme algo humeda, ya sabeis a lo que me refiero... el caso es que le llevé al cuarto del ordenador y se sentó a mirarlo, yo estaba de pie a su lado, podia notar que me estaba calentando de pensar en la situación de la entrada... el se puso a trastear con el ordenador y en un momento dado, me pidió que desconectara el router, este estaba sobre el equipo bajo la mesa, me agache a soltarlo, justo delante de el, y mis tetas, por el escote de la camisa, quedaron claramente a su vista, noté que me miraba y me "entretuve" en quitar y poner el enchufe...

Al levantarme, vi que estaba rojo cómo un tomate, le dije que si se encontraba bien, y me dijo que si, que sólo tenia un poco de calor, y ese fue mi momento, le dije que si queria se podía quitar la camiseta, que estabamos solos y no iba a llegar nadie, el se hizo el remolón, "no tranquila, estoy bien así" yo insistí, y le pregunté que si le daba verguenza, el dijo que ninguna, y se la quitó... tenia el pecho casi imberbe, unos abdominales marcados pero sin llegar a ser una tableta de chocolate y unos brazos fuertes, yo estaba cachonda, no podía más, así que decidí dar un paso más, me acerque a el para mirar por encima de su hombro lo que hacía con el equipo, aprovechando para que mi pezón erecto tocara su desnuda espalda a traves de mi camiseta, el se puso tenso, creo que se agobio y le dije ¿te gusta la situación? y me dijo, eh? no entiendo, y le dije ¿que si te gustaria que tu y yo hicieramos algo más?, el se quedo mudo, momento que aproveche para quitarme la camiseta y dejarle delante mis pechos, los pezones me iban a estallar, y noté que a el también se le ponian duros, me acerque y le dije "besamelas tonto..." ahi el exploto, se lanzó a devorar mis tetas con el ansia que da la juventud, me mordisqueaba los pezones que cada vez tenía más duros, y decidí atacar su cinturon, se lo quite y desabroche los botones del pantalon, meti mi mano y ahí lo tenia, tenia la polla humeda, la agarre con fuerza y comencé a menearsela, tenía la mano empapada, me la lleve a la boca y la saboreé mientras con la otra seguía bajandole los pantalones hasta dejarlo totalmente desnudo delante mio, entonces me separé, le dije "ahi quieto", me baje los pantalones y mis bragas empapadas, me arrodille delante de el y me la metí en la boca, me encanta el sexo oral, el gemía como loco, se contraía y finalmente se corrió en mi boca, con un gusto a semen joven que aún me excito más... el hizo ademán de recoger y le dije, "estate quieto, no hemos terminado", le lleve a mi habitación y le tumbe en la cama, le dije "ahora vas a darme tu placer a mi bonito", eso le puso cachondo y se empalmo otra vez, me puse de cuclillas sobre el y fui bajando hasta que mi chocho, depilado pero con rayita, quedó al alcance de su lengua, el chupaba como un condenado, mi botoncitó se salia de los labios vaginales y el lo notaba, porque le prestaba especial interés con su lengua, me corrí, estaba a 200 y creo que me debió oir todo el vecindario... antes de irse, le invité a ducharse en casa, y en la ducha, volvimos a hacerlo, esta vez abrí el grifo de la ducha, me puse a cuatro patas y le dije, "correte dentro no me voy a quedar embarazada"...

De vez en cuando, cuando no están mis hijos, viene por casa y tenemos una sesión de sexo en casa...pero eso ya son otras historias.

Envianos tu relato a pornoparamujer@gmail.com

7 comentarios:

  1. Por Dios,me has puesto a cien,además me llanos Javier.Besos

    ResponderEliminar
  2. Oye me podrías mandar fotos de tus tetas por facebook estoy como Carlos Escobar Pérez

    ResponderEliminar
  3. Oye me podrías mandar fotos de tus tetas por facebook estoy como Carlos Escobar Pérez

    ResponderEliminar